Cómo tratar los desgarros cutáneos

En esta sección, obtendrá la siguiente información:

Cómo tratar los desgarros cutáneos

Al tratar los desgarros cutáneos, deben perseguirse tres objetivos principales:¹

Preservar el colgajo de piel y mantener el tejido circundante.
Volver a acercar los bordes de la herida (sin estirar la piel).
Reducir el riesgo de infección y extensión de la lesión.

El Algoritmo de decisiones para el manejo de desgarros cutáneos le ayudará a lograr esos objetivos.¹

Uso del Algoritmo de decisiones para el manejo de desgarros cutáneos

Para tratar un desgarro cutáneo, siga estos cinco pasos:¹

Paso 1: Evalúe la herida y asegúrese de controlar la hemorragia.

CONSEJO: El Triángulo de evaluación de las heridas puede ser una herramienta útil para evaluar las heridas mediante un enfoque holístico.

Paso 2: Limpie la herida.

Paso 3: Acerque los bordes de la herida. Determine de qué tipo de desgarro cutáneo se trata utilizando el sistema de clasificación. Asegúrese de medir y documentar la herida.

Paso 4: Establezca los objetivos del tratamiento, los cuales incluirían los siguientes:

tratar la causa;
implementar el protocolo de prevención;
fomentar la cicatrización húmeda de la herida
evitar traumatismos;
proteger la piel perilesional;
controlar el exudado;
evitar la infección;
controlar el dolor.

Paso 5: Elija su opción de tratamiento segúne el tipo de desgarro cutáneo que presenta el paciente.

Cómo elegir el apósito adecuado

El Cuadro 1 describe las diferentes opciones de apósitos según el tipo de desgarro cutáneo..

Tratamiento con apósitos

Puede tener en cuenta algunos consejos básicos sobre el uso de los apósitos que le ayudarán a proteger la piel del paciente y propiciar la cicatrización de la herida. Intente hacer lo siguiente:¹

Marque el apósito con una flecha para que resulte claro en qué dirección debe retirarse.
Utilice un elemento que elimine el adhesivo cuando retire el apósito, ya que minimizará el traumatismo.
Retire el apósito lentamente.
Utilice un producto de barrera para proteger la piel circundante.
Aplique un emoliente para suavizar y ablandar la piel alrededor de la herida, ya que le ayudará a evitar un mayor desgarro.

NOTA: Debe continuar controlando la herida para detectar cambios o signos de infección. Si la herida no mejora (p. ej., tras cuatro evaluaciones) o si empeora, derive al paciente al especialista que corresponda.¹

Si el paciente tiene piel frágil

Si el paciente tiene piel delicada, se habrá de elegir un apósito que:¹

controle la hemorragia;
sea fácil de colocar y retirar;
no produzca traumatismos al retirarlo;
optimice el entorno de cicatrización;
permita que se utilice por un tiempo prolongado;
no sea tóxico;
sea flexible y se adapte a la forma de la herida.

Cuadro 1: Guía para elegir el apósito¹

Tipo de apósito	Tipo de desgarro cutáneo	Cuándo debe utilizarse	Lo que ha de tener presente
Apósito de espuma	2, 3	En heridas que tienen exudado moderado o cuando el apósito se mantiene colocado por un período más prolongado (de 2 a 7 días, según el nivel de exudado)	Utilice una versión no adhesiva cuando sea posible, ya que se evitará dañar la piel circundante (perilesional). Nota: No se aplica a productos con bordes de silicona.
Alginatos de calcio	1, 2, 3	En heridas que tienen nivel moderado a abundante de exudado. Este tipo de apósito también puede contribuir a detener las hemorragias leves (es decir, tiene acción hemostática).	Puede secar el lecho de la herida si el nivel de exudado no lo suficientemente alto. Con este tipo de apósito, se necesita uno secundario que lo cubra.
Fibras gelificantes	2, 3	En heridas que tienen nivel moderado a abundante de exudado.	Estos apósitos no tienen acción hemostática; pueden secar el lecho de la herida si el nivel de exudado no es lo suficientemente alto. Además, con este tipo de apósito, se necesita uno secundario que lo cubra.

Otras opciones de tratamiento

Las tiras para el cierre de heridas pueden ser un tratamiento eficaz para juntar los bordes de la herida, ya que permiten cerrar la herida sin generar tensión en los tejidos.²La terapia de compresión también puede ser eficaz en el tratamiento de los desgarros cutáneos, dado que reduce los efectos nocivos de edema (es decir, la acumulación de líquido en los tejidos perilesionales).²Asimismo, disminuye el riesgo de que se formen coágulos de sangre (trombosis venosa profunda).^{3, 4}La terapia de compresión puede utilizarse en la mayoría de las heridas traumáticas.

Referencias

ISTAP Best Practice Recommendations for the Prevention and Management of Skin Tears in Aged Skin 2018
Acute Wounds. Identification, assessment and management of acute wounds. Coloplast HEAL course.
Sachdeva, A., Dalton, M., Amaragiri, S.V., Lees, T. (2010). Elastic compression stockings for prevention of deep venous thrombosis. Cochrane database of Systematic review(7), 1-55.
Sachdeva, A., Dalton, M., Amaragiri, S.V., Lees, T. (2014). Graduated compression stockings for prevention of deep vein thrombosis (review). Cochrane database, Cochrane database of systematic reviews 2014(12).